Ciego de Avila, en el centro de Cuba.
Ciego de Ávila forma parte de las CATORCE provincias con que cuenta la isla de Cuba. Ubicada en la región central del país posee entre sus atractivos un enorme potencial en la industria azucarera y una cultura centenaria.
Principal ciudad de la provincia, se fundó en MIL 840 en terrenos del hato de su denominación con el título de Santa Eugenia de la Palma. Es en ese año cuando se edificaron las primeras viviendas con una población de 263 habitantes.
En la fecha de su fundación el panorama del territorio mostraba un terreno arenoso y bajo, y la naciente ciudad estaba rodeada de sabanas y potreros.
Señalan los licenciados José Antonio Quintana García
y Sixto Espinosa Dorta que en el análisis de la palabra ciego, los historiadores se han puesto de acuerdo, coincidiendo en que corresponde a la situación geográfica pues ciego se le denomina al terreno llano, bordeado de bosques y al que es difícil acceder. En cuanto a Ávila se ha llegado al consenso de que está relacionada con el apellido del primer colonizador que pisó estos lares, pero su nombre aún es una incógnita.
Su economía se sustenta en la agricultura, la industria, el comercio y los servicios, el turismo se ha integrado a sus encantos en uno de los más prometedores destinos turísticos cubanos gracias a la construcción de un pedraplén que enlaza a la tierra firme con los cayos Coco y Guillermo, donde se levantan un gran número de hoteles.
Al igual que en el resto de la isla, en la provincia de Ciego de Ávila la educación es gratuita y constitucionalmente obligatoria. En el existen centros de enseñanzas especializadas y politécnicas, así como facultades universitarias y otros planteles de educación superior.
La Ciudad de los Portales cuenta con un sistema de atención primaria a la salud con cobertura en sus DIEZ municipios. Este sistema que rige en todo el país es único en Latinoamérica. La esperanza de vida al nacer es de 76 años.
Muchas de las personas que se refieren hoy a este territorio le conceden la posibilidad de descansar en estrecho contacto con la naturaleza lejos de las ruidosas ciudades modernas, pero la provincia avileña es también un baluarte inexpugnable de la Revolución dirigida por Fidel.